“Creo que uno de los mejores momentos de mi carrera vino después que cumplí 30”, dijo el estadounidense, que suma ya 37 ruedas CARACAS.- A Miguel Cabrera le llovieron los elogios el pasado jueves, no solo porque cumplió 30 años de edad sino además por el futuro promisorio que le espera en las Grandes Ligas a tan corta edad.
“Una vez que cumple 30, tú te preguntas si en realidad podrá volverse más inteligente”, aseveró su compañero en los Tigres de Detroit, el jardinero Torii Hunter.
“¿Cómo puede un pelotero que ganó la triple corona adquirir mayor conocimiento? Es algo que verdaderamente es escalofriante para los demás equipos”, asomó quien hasta la temporada pasada vestía el uniforme de los Angelinos de Los Ángeles.
Hunter posee algo de experiencia en eso de mejorar después de los 30. El patrullero llegó a la tres décadas en 2005, una zafra en la que jugó 98 partidos con los Mellizos de Minnesota debido a una lesión.
En la siguiente campaña alcanzó un tope personal con 31 cuadrangulares e inició una seguidilla de seis temporadas con 20 o más jonrones que se detuvo apenas en 2012 con 16 batazos de vuelta entera; además, tuvo cinco años al hilo con OPS igual o superior a .800.
Aún en sus treinta, Hunter tiene un promedio de 20 puntos más en average y slugging que cuando transitaba por los 20. Igual ecuación se presenta con en el OPS, donde está 40 puntos por encima.
“Creo que uno de los mejores momentos de mi carrera vino después que cumplí 30”, dijo el estadounidense, que suma ya 37 ruedas.
“Pienso que me volví más inteligente, antes de eso yo poseía puro talento, pero sin pulir, no sabía qué estaba pasando, yo solo entendía que debía batear y tener energía”.
“Ni siquiera me estrechaba bien al llegar al estadio, pero ahora soy más inteligente con mi cuerpo, con mi juego, con mis análisis de los partidos. Actualmente soy un jugador que usa más el cerebro”, concluyó Hunter.
“Una vez que cumple 30, tú te preguntas si en realidad podrá volverse más inteligente”, aseveró su compañero en los Tigres de Detroit, el jardinero Torii Hunter.
“¿Cómo puede un pelotero que ganó la triple corona adquirir mayor conocimiento? Es algo que verdaderamente es escalofriante para los demás equipos”, asomó quien hasta la temporada pasada vestía el uniforme de los Angelinos de Los Ángeles.
Hunter posee algo de experiencia en eso de mejorar después de los 30. El patrullero llegó a la tres décadas en 2005, una zafra en la que jugó 98 partidos con los Mellizos de Minnesota debido a una lesión.
En la siguiente campaña alcanzó un tope personal con 31 cuadrangulares e inició una seguidilla de seis temporadas con 20 o más jonrones que se detuvo apenas en 2012 con 16 batazos de vuelta entera; además, tuvo cinco años al hilo con OPS igual o superior a .800.
Aún en sus treinta, Hunter tiene un promedio de 20 puntos más en average y slugging que cuando transitaba por los 20. Igual ecuación se presenta con en el OPS, donde está 40 puntos por encima.
“Creo que uno de los mejores momentos de mi carrera vino después que cumplí 30”, dijo el estadounidense, que suma ya 37 ruedas.
“Pienso que me volví más inteligente, antes de eso yo poseía puro talento, pero sin pulir, no sabía qué estaba pasando, yo solo entendía que debía batear y tener energía”.
“Ni siquiera me estrechaba bien al llegar al estadio, pero ahora soy más inteligente con mi cuerpo, con mi juego, con mis análisis de los partidos. Actualmente soy un jugador que usa más el cerebro”, concluyó Hunter.